¡Feliz semana a todos! ¿Qué tal la habéis pasado? Está haciendo frío estos días, así que acurrucaos bien rodeados de calorcito para no pillar resfriados fuertes. Hoy voy a hablar de un tema que me lleva dando vueltas en la cabeza desde que, buscando una lista de sagas de vampiros para una prima mía, encontré una en la que se mencionaban algunas declaraciones que me llamaron bastante la atención de la autora de Crepúsculo (aquí tenéis el link; habréis de bajar un poco para dar con lo que quiero hablar).
En el blog que os he enlazado se nombran varias sagas literarias sobre vampiros, unas más conocidas que otras (si queréis anotároslas, adelante). El comentario sobre la saga de Crepúsculo incluye algunos comentarios de la autora, Stephenie Meyer, entre los cuales me ha llamado mucho la atención el que dice que los adolescentes no necesitan leer sobre sexo. Podéis decirme que los tiempos han cambiado, que la sociedad ahora tiene la mente más abierta en algunos aspectos en relación con décadas pasadas y posiblemente podríamos hacer debate sobre qué generación tuvo la mejor juventud de la historia. Yo nací en 1990, tengo una mentalidad concreta en lo referente a algunos temas y, si bien acepto las opiniones de los demás, no estoy de acuerdo con muchas de las cosas que veo en la actualida.
Supongo que cada familia tendrá sus normas, sus permisiones y todo eso. Si unos padres dejan a sus hijos pequeños coger según qué libros, ellos sabrán lo que hacen. Yo, en mi opinión, según qué historias dejaría en un estante alto y hasta que la criatura en cuestión no alcance una edad para tratar y comprender el tema del que se habla sin problema, no le dejaría leer. Desgraciadamente, encarrilando con la declaración de Meyer, los críos de hoy en día están yendo demasiado rápidos en el tema sexual y me hace pensar que estamos en una sociedad cuya esperanza de vida ha bajado drásticamente y, por ello, hay que juntarse y reproducirse bastante antes de los 16 para que la especie perdure (no voy a entrar en debate en eso ahora, os recuerdo que estamos en un blog literario). A mí, sinceramente, eso no me gusta nada y, por lo mismo, tampoco dejaría un libro erótico en manos de una criatura que debería estar centrada en disfrutar los últimos años de la infancia.
Tomando el comentario de lleno, me parece un poco arriesgado excusar algún punto de una historia diciendo que no es necesario que el público lea sobre ese tema. Hasta donde yo sé, por haber visto las películas, la historia de Crepúsculo no va sobre cómo el vampiro acaba llevándose a la humana a la cama. Tampoco es una historia erótica, es una historia para el público adolescente, con romanticismo; sé de sobras que no me voy a encontrar ninguna escena fogosa cuando decida atreverme a leer los libros. El hecho de ser una novela juvenil romántica no lleva a que haya sexo detallado obligatoriamente. Si no quieres tratar el tema directamente en la forma de las novelas no eróticas, por el motivo que sea, eres libre de no tratarlo; es tu libro, tu historia, tú eres su dueña y tú decides qué sale y qué no sale.
En mi opinión, sin haber encontrado un vídeo o una noticia con la declaración completa para entender bien las palabras, yo más bien diría que "no es necesario hablar de sexo para explicar esta historia". Pienso que cada cual es libre de elegir qué leer y qué no leer; a veces se necesita un libro romántico, a veces uno de intriga y a veces, ninguno. Creo que la gente es consciente de que, al leer una historia juvenil romántica se va a encontrar con una historia de amor; si están pensando en encontrar escenas de sexo duro en el 50% de sus páginas, se ha equivocado de etiqueta. En resumen: el lector es importante, sí, pero no creo que sea el motivo de excusa por el que no se hace algo porque, al final, tal y como está la sociedad hoy en día, el lector hace lo que le da la gana.
Y hasta aquí por hoy. Si alguien encuentra por un casual la declaración y me la pasa, estaré agradecida y encantada de leerla. Ésta es mi opinión y esto es lo que pienso sobre el tema. Podéis opinar vosotros también y decid lo que pensáis incluso entre vosotros. Lo único que os pido es respeto, tanto por mí, que he sido la primera en sacar el tema, como por los que comentéis y también por Stephenie Meyer, la cual no va a poder defenderse (aunque ya sería flipante que apareciese por aquí... ¿os imagináis?).
Nos leemos la semana que viene. Hasta entonces, cuidaos que los resfriados están a la orden del día.